¿ES DIFICIL SER UN BUEN
JEFE?
Habitualmente
escuchamos a nuestros familiares, amigos o somos nosotros mismos quienes nos
quejamos de nuestros jefes. Que si no me dejo hacer esto, que si es muy rígido,
que si es muy blando, que si todo me lo manda a mí, que si echa muchas broncas,
etc.
Será verdad que una persona
al ascender a jefe o poseer un liderazgo de un grupo natural, se convierte a su
vez en un ser poco deseable. Tal vez esto pueda estar relacionado con que el
papel de jefe es difícil de desempeñar al gusto de todos. Por otro lado, en vez
de intentar colocarnos en el lugar del jefe e intentar comprender el porque de
sus mandatos o recriminaciones, es mas cómodo culparles de todo y así deshacernos
de cualquier posible culpa.
En general, en cualquier
grupo que se forme de personas, el propio proceso de grupo va estableciendo una
serie de roles que, dependiendo de las características de sus miembros, van
asumiendo unos u otros. Un rol o papel fundamental que se va asumir es el de
líder o jefe de ese grupo. Se considera
líder tanto a la persona que desempeña algún puesto de dirección en algún nivel
de la jerarquía de una empresa, como a la persona más influyente de un grupo
natural. Por ejemplo, el líder escolar será aquel chico que ejerza mayor
influencia entre sus compañeros. El liderazgo es uno de los procesos grupales
básicos y el fenómeno grupal sería incomprensible si se prescindiera de él.
La elección de ese líder o
jefe, en un grupo natural, generalmente se hace por consenso y porque la
persona elegida dispone de unas características valoradas por el grupo en
general. Por ejemplo, en un grupo de chicos puede ser el líder el que más hábil
sea para jugar a las canicas, en un grupo de amigos el más simpático, entre los
alumnos de una clase el que saque mejores notas, etc. Es verdad que priman para asumir este papel también
una serie de características del individuo relacionadas con las habilidades
sociales.
Pero qué pasa con el acceso
a las jefaturas en los trabajos. En muchos sitios se hace una buena selección
de los puestos de jefatura, teniendo en cuenta no solo la trayectoria de las
personas sino además algunas habilidades sociales y personales que vamos a ver
ahora. En otros lugares promocionan a puestos de jefaturas el personal que más antigüedad
tenga y esto en muchas ocasiones no es una característica que defina un buen desempeño
de la labor de jefe. Llevar mucho tiempo desempeñando una tarea es importante y
te da conocimiento sobre la tarea, pero no es una característica que garantice la
labor de un jefe.
Sería lo más adecuado
valorar no solo la antigüedad y el curriculum vitae y trayectoria del personal sino
además otras características propias del sujeto. Estas habilidades que algunos
tienen, en general la mayoría se pueden aprender o adquirir con un buen
entrenamiento. También hay que tener en cuenta el tipo de grupo para evaluar qué
características que nos ayudarán a ser buenos jefes.
Empatía y comunicación. Para
asumir un liderazgo o una jefatura de un modo adecuado es fundamental que
exista una buena comunicación entre el jefe y los que dirige y además que se
pudiera llegar a empatizar mutuamente; o sea que el jefe pueda colocarse en el
lugar del subordinado y éste en el lugar de su jefe. De esta manera el
entendimiento entre ambas partes aumenta.
Otra característica de los
lideres es la capacidad para asumir responsabilidades y desarrollar la
imaginación para resolver problemas de la organización y objetivos de su grupo.
Debe crear las condiciones para que los que forman el grupo se integren en la
consecución de los objetivos del grupo y que los hagan usando al máximo sus
capacidades. Además, el grupo tiende aceptar a líderes con capacidades y
características tales que faciliten la consecución de los propios objetivos del
grupo.
Algunos estudios establecen
algunas características comunes de los lideres y/o jefes como son: superar al
promedio de los miembros del grupo en inteligencia, nivel de escolaridad,
responsabilidad, sociabilidad, iniciativa, persistencia, autoconfianza,
integridad, buena tolerancia al estrés, cooperatividad, popularidad, capacidad
de adaptación y facilidad de expresión verbal, características estas exigidas
muchas veces en los grupos formales y otras necesarias para los naturales.
Todas estas características facilitan el desempeño de sus funciones.
Funciones
generales de una jefatura:
·
Definir
los objetivos y mantener la dirección hasta su consecución.
·
Proveer
los medios para alcanzar los objetivos.
·
Mantener
la estructura del grupo y facilitar la interacción entre sus miembros.
·
Mantener
la cohesión del grupo y la satisfacción de sus miembros.
·
Facilitar
y motivar el rendimiento del grupo en sus tareas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario